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Inicio / Quiénes somos / De mano en mano / Contacto "Ser y/o no ser"... ¿el dilema? ...o una nueva estrategia para ocultar información pública J. Victoriano Martínez Guzmán / Agosto 26, 2009. Cualquiera que lea los oficios OM-DT-226/2009 y OM-DT-230/2009 de la Oficialía Mayor del Gobierno del Estado podría pensar que Humberto Picharra Carrete, titular de esa dependencia, debe sufrir cada mañana al verse al espejo y tener que responderse una pregunta: "¿Quién soy el día de hoy: oficial mayor o presidente del Comité para la Desincorporación y Venta de Bienes Propiedad del Estado?" No obstante, si se consideran los antecedentes de ambos documentos queda a la vista un perverso juego de cambiar de cachucha como estrategia para no atender el derecho de acceso a la información pública y ser opaco con justificación. La historia es la siguiente: El 21 de julio de 2009, Eduardo Martínez Benavente solicitó a la Secretaría de Desarrollo Agropecuario y Recursos Hidráulicos (SEDARH) la siguiente información: "Copia simple del avalúo o los avalúos realizados durante la actual administración, por elaboración propia o contratados a terceros, sobre los invernaderos de Santa Rita, especialmente el avalúo considerado dentro del Decreto 558, publicado el 18 de junio de 2009 en el Periódico Oficial del Estado". La solicitud también incluía la petición de otros datos: "Nombres de los postores que atendieron a la convocatoria para la venta de los invernaderos de Santa Rita en la que se mencione el monto de la oferta planteada por cada uno de ellos. En caso de que los postores sean personas morales, solicito una copia de la escritura constitutiva". Mediante Acuerdo de Resolución 308/0080/09, la SEDARH negó la información al afirmar que no la poseía y dio la siguiente orientación para acceder a los datos requeridos: "Se le orienta, sin que se tenga conocimiento por parte de este ente, de la disponibilidad y accesibilidad de la información peticionada, a que interponga su solicitud ante el 'Comité para la Desincorporación de Bienes Propiedad del Estado' cuya presidencia recae en el Oficial Mayor del Gobierno del Estado". Con la orientación de la SEDARH, Martínez Benavente presentó una solicitud de información similar el 10 de agosto a Humberto Picharra Carrete, oficial Mayor del Gobierno del Estado, en quien "recae la presidencia" del Comité. Lejos de obtener la información, Martínez Benavente recibió dos oficios firmados por Pizharra Carrete. En el primero sorprende que Picharra Carrete se haya "partido en dos" y la petición sólo la haya podido leer como oficial mayor, y no como el oficial mayor "en quien recae" la presidencia del Comité para la Desincorporación y Venta de Bienes Propiedad del Estado: "Le solicito se corrija el dato de la solicitud, en el sentido de que la misma debe ser dirigida al suscrito, en mi calidad de Presidente del Comité para la Desincorporación y Venta de Bienes Propiedad del Estado", pide a Martínez Benavente en un auténtico acto de esquizofrenia burocrática. La esquizofrenia queda al descubierto como una mera treta para evadir el derecho de acceso a la información pública en el segundo oficio, cuando Picharra Carrete se vuelve a dividir en dos para mostrar la verdadera intención de su falso dilema entre ser y no ser: "Le comunico que el suscrito en mi carácter de Oficial Mayor, no cuenta con la información que fue solicitada mediante escrito de fecha 10 de agosto del presente, toda vez que la autoridad competente que en el caso resulta ser el Comité para la Desincorporación y Venta de Bienes Propiedad del Estado... es a quien corresponde determinar si se entrega o no la información requerida". Traducción: "Yo no la tengo, la tiene mi otro yo, que en este momento no me conviene ser". Que la Ley de Transparencia exija que se debe privilegiar el principio de máxima publicidad en la información está de más. A pesar de todo, esta historia revela que la información existe, pero que en realidad lo que se orquestó fue una treta para burlar el derecho de acceso a la información pública que, más que burlarse de quien solicitó la información, Picharra Carrete se burla de toda la sociedad que tiene ese derecho. Así, pareciera que la preocupación de Picharra Carrete cada mañana no es preguntarse "¿Quien soy?", sino más bien "¿Quién me conviene ser esta vez para burlarme de la sociedad a la que debo servir y que con sus impuestos me paga tan jugoso sueldo?".
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VISOR DE TRANSPARENCIA 6as Jornadas de Acceso a la Información Pública 2008 Lista obtenida a través de solicitudes de información
Lista obtenida a través de solicitudes de información
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